Un hombre se sienta en un tren frente a una voluptuosa rubia, que lleva una pequeña minifalda puesta. Aunque lo intentaba, no era capaz de retirar su mirada de sus enormes muslos, y de tanto fisgonear se da cuenta que la chica va sin ropa interior.
La rubia se da cuenta de que el la mira justo ahí y le dice:
- Me estás mirando el coñito, ¿verdad?
- Sí, disculpa – responde sonrojado el hombre tras quitar su Mirada.
- Está bien, no te preocupes – responde la mujer – ¿sabes? Soy muy habilidosa, mira esto, voy a hacer que mi coñito te guiñe un ojo.
Dicho y hecho. El hombre mira asombrado como el coño le guiña y da un par de pestañeos.
Él, totalmente asombrado, le pregunta:
- ¿Que "otras cosas" sabe hacer...?
- También puedo hacer que te tire un besito.
La chica sube un poco más la falda para que el hombre tenga una vista completa y despejada. Acto seguido increíblemente el coño contrae sus labios y le tira un beso con sonido incluido ("¡¡MUAACK!!").
El hombre no podía creer semejante expresión de raro talento.
- Ven y siéntate a mi lado – le sugiere ella.
El hombre ni corto ni perezoso, se sienta al lado de ella y la rubia le pregunta sugestivamente:
- ¿Quieres meterme un par de deditos?
Paralizado de asombro el hombre le dice:
- ¿¿¡¡No jodas que también silba!!??
Vía laviniagrup.
La frase del día
"Quien madruga duerme menos".
jueves, 16 de julio de 2009
El coño prodigioso
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